El rejuvenecimiento de papada con hilos tensores es un procedimiento no quirúrgico que se realiza para tensar y levantar la piel flácida de la zona de la papada y mejorar su apariencia. La papada, también conocida como doble mentón, es un problema común que puede aparecer a medida que envejecemos.
¿Cómo se realiza un rejuvenecimiento de papada con hilos tensores?
A continuación, te explicamos los pasos generales que se siguen en el procedimiento de rejuvenecimiento de papada:
- Anestesia local: antes de comenzar el procedimiento de rejuvenecimiento de papada, se aplica anestesia local en la zona de la papada para reducir cualquier molestia o dolor.
- Inserción de los hilos tensores: el siguiente paso es la inserción de los hilos tensores a través de pequeñas incisiones en la piel de la papada. Los hilos están hechos de material biocompatible y se insertan debajo de la piel mediante una aguja especial. Los hilos tienen pequeños ganchos que se anclan en la piel y se usan para levantarla y tensarla.
- Ajuste de los hilos: una vez que se han insertado los hilos, se ajustan para lograr el resultado deseado. Esto puede implicar tirar de los hilos en diferentes direcciones para tensar la piel o anudarlos para asegurarse de que se mantengan en su lugar.
- Cierre de las incisiones: después de ajustar los hilos, se cierran las incisiones con puntos de sutura o adhesivos de piel.
- Recuperación: después del procedimiento de rejuvenecimiento de papada, el paciente puede experimentar algunas molestias en la zona, pero estos síntomas suelen desaparecer en unos pocos días. La persona puede regresar a su actividad normal en un corto periodo de tiempo, aunque se recomienda evitar cualquier actividad física vigorosa durante unos días.
¿Por qué sale la papada?
Existen varios factores que pueden contribuir a su aparición, entre ellos:
- Pérdida de elasticidad de la piel: con el envejecimiento, la piel pierde su elasticidad natural, lo que puede provocar que la piel debajo del mentón se afloje y caiga.
- Acumulación de grasa: la acumulación de grasa en la zona de la papada también puede ser un factor. Con el tiempo, es posible que el cuerpo comience a almacenar grasa en esta área, lo que puede provocar que la piel se estire y aparezca la papada.
- Genética: la genética también puede desempeñar un papel importante en la aparición de la papada. Si tu familia tiene antecedentes de desarrollar papada, es más probable que tú también la desarrolles.
- Pérdida de tono muscular: el debilitamiento de los músculos de la mandíbula y el cuello también puede provocar la aparición de la papada. Con el tiempo, estos músculos pueden perder su tono y firmeza, lo que puede provocar que la piel debajo del mentón se afloje.
- Postura: una mala postura, como encorvar los hombros o inclinar la cabeza hacia adelante con frecuencia, también puede provocar la aparición de la papada. Esto puede afectar el tono muscular y la elasticidad de la piel en la zona del cuello y la mandíbula.
- Aumento de peso: el aumento de peso puede hacer que la grasa se acumule en la zona del cuello y la mandíbula, lo que puede provocar la aparición de la papada.
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